BRISBANE TRAIL ULTRA 2022: CRÓNICA PERSONAL MEDALLA DE PLATA BTU60

BRISBANE TRAIL ULTRA 2022: MEDALLA DE PLATA BTU60. Por @SoyMarcis: Desde el 8 al 10 de Julio la carrera australiana ha sido el evento principal de la capital de Queensland. Sus 6 distancias han llenado el entorno de corredores y de ambiente de trail. Formaba parte del circuito Spartan Trail World Championship. y hoy vengo a contaros cómo viví yo esta experiencia de la que saqué mucho más que una inesperada segunda posición.

No fui el único español corriendo en Australia, además de nuestro compi Sabugo que corrió 100 millas, Sara Alonso y Antonio Martinez se hicieron con BTU30. Comenzamos con la entrevista previa que les hicimos:


CRÓNICA PERSONAL BRISBANE TRAIL ULTRA 2022

NOS VAMOS A AUSTRALIA

La oportunidad de vivir esta increíble experiencia llegó en primavera y no me lo pensé dos veces. Hace doce años pasé un verano entero estudiando en Australia y desde entonces siempre había soñado con volver, no me imagino mejor manera que hacerlo para correr y contar la experiencia.

La BRISBANE TRAIL ULTRA ofrece una variedad de distancias a elegir según tu nivel y tus ganas de echarle horas al trail, claro está.

En mi caso, elegí la BTU60 por varios motivos: en primer lugar, me parecía un viaje demasiado largo para ir a correr una distancia menor, en mi cabeza estaba el único objetivo de disfrutar y vivir la experiencia así que el reto de aumentar distancia de una manera menos competitiva me pareció una buena idea.

Por otro lado, en Octubre voy a correr TP60 y parecía bastante lógico hacer una incursión previa en la distancia para poder adaptar los entrenamientos de cara a una cita a la que le tengo muchísimas ganas, correr en casa siempre es un aliciente.

En último lugar, el perfil de la carrera me parecía el más adecuado ya que la distancia de 30 con 800m+ me parecía poco y las demás se me iban de las manos, así que decidido: nos vamos a BTU60.

Si queréis saber cómo me preparé os dejo aquí el ARTÍCULO.

 

CRÓNICA PERSONAL BRISBANE TRAIL ULTRA

EL VIAJE Y LOS DÍAS PREVIOS

Lo de irse al otro lado del mundo no es cosa de unas horas, más bien de días. En este caso había que viajar con tiempo para poder aclimatarse y evitar el temido jetlag. Además, ya que nos vamos a la antípodas, lo mejor es aprovechar los días para conocer una cultura distinta. No todo va a ser correr.

Como corredores populares que somos, correr tiene que ser siempre la excusa que nos lleve a vivir un montón de experiencias, de conocer lugares nuevos y de aventurarnos a destinos que, de otra manera, quizá nunca nos habríamos planteado. Correr puede ser el empujón necesario para dar el paso.

ESTAMOS EN BRISBANE

Brisbane es una ciudad vibrante, llena de ambiente y movimiento por todas partes. Da la sensación de que está en constante renovación, se pueden ver grúas y obras enormes por todas partes. En todas las esquinas hay algo a punto de inaugurarse o recién inaugurado.

La ciudad es atravesada por el serpenteante río Brisbane y cuenta con multitud de puentes por donde cruzarlo. En ambas riveras tiene un paseo donde se concentra gran cantidad de deportistas, ya sea corriendo, en bici e incluso haciendo escalada en las paredes de Kangaroo Cliffs (lugar cercano a la meta).

Además de un centro repleto de rascacielos y grandes avenidas, cuenta con cientos, si no miles, de locales para comer. Al fin y al cabo las casas de los australianos están en las afueras y en esta zona sólo hay hoteles y apartamentos para los turistas. Esto hace que todos los trabajadores y los visitantes nos juntemos en los abundantes locales de comida, repletos de gente trajeada y forasteros como nosotros que venimos a disfrutar de la amplia oferta gastronómica que tiene este país.

TURISTAS-RUNNERS

Lo primero es lo primero, fuimos a recoger nuestro dorsal con bastante antelación a la tienda K2BaseCamp, allí mismo nos revisaron la extensa lista de material obligatorio para la carrera. Incluida la famosa venda «por si te muerde una serpiente». Un buen detalle esto de tener un lugar al que acudir días antes y así evitar aglomeraciones en la salida de la carrera.

Aprovechamos el maravilloso paseo del río para trotar y soltar las piernas o realizar los entrenos previos a la gran cita del finde. Y como no podía ser de otra manera, fuimos a conocer de primera mano la fauna local en Lone Pine Sanctuary. Canguros, koalas, emus, serpientes, diablos de Tasmania, wombats y hasta unos simpáticos ornitorrincos que son muy complicados de ver.

Como buenos corredores de montaña, no todo va a ser correr, es importante descansar y comer. Esto se hace bastante fácil cuando tienes una oferta gastronómica tan amplia a dos pasos del hotel. Ah, hablando del hotel y de la recuperación… la piscina climatizada con jacuzzi y gimnasio ayudaron bastante a relajar el cuerpo antes de la batalla.

HEMOS VENIDO A CORRER

Y por fin llegó el día esperado. A las 5am sonaba mi despertador en South Bank y me ponía en pie de un salto, la verdad es que no dormí mucho a causa de los nervios y estaba ansioso por salir de allí y ponerme mi primer dorsal internacional. Además se sumaban los nervios porque iba a correr mi primer ultra. Un día de primeras veces vaya.

Desayuno potente, en principio iban a ser 65kms y unos 4000+/- pero… luego veremos que fueron más. Revisión de todo el material y taxi hasta la salida, que en este caso era en diferente lugar a la meta (que nos quedaba a tan sólo 2kms del hotel).

A las 6.30am me planto en Corra Mulling Park en The Gap con unos maravillosos 8ºC. Por allí está todo montado y empiezan a llegar corredores y corredoras que se arrinconan al rededor de los puestecitos con estufas. Recogemos nuestro GPS que servirá a la organización para saber dónde estamos en todo momento, un buen detalle que hace que me sienta muy seguro.

Me cambio y comienzo a calentar cuando quedan menos de 30 minutos para la salida. Nervioso, trato de soltarme, quiero disfrutar pero no puedo evitar sentir esos nervios que me empujan a darlo todo y competir al máximo. Sé que voy a disfrutar, pero sé que voy a sufrir, no sé ponerme un dorsal sin darlo todo.

7:59 am y colocado ya en la línea de salida junto a los casi 200 corredores de la BTU60, mensajes de buena suerte «good luck mate», algún comentario a la banderita de España en mi dorsal y pistoletazo de salida.

 

CRÓNICA PERSONAL BRISBANE TRAIL ULTRA

PRIMEROS 30 KMS

Tomamos la salida en un grupo compacto que da la vuelta al parque para meterse por un pequeño sendero de rocas siguiendo el curso de un riachuelo. Al principio voy al ritmo de todos, cómodamente incluso charlando, es un ultra y quiero salir con calma pero… van demasiado tranquilos para los nervios que tengo yo dentro así que meto una marchita más y aprovecho mi destreza en terreno técnico para ir brincando por las piedras y sacando distancia sin mucho esfuerzo.

En menos de 2kms salimos a las pistas forestales y me doy cuenta de que estoy prácticamente sólo, así que adopto un ritmo alegre pero cómodo, no quiero pasarme de revoluciones y pagarlo al final. Hasta el km 13 todo va de maravilla, es ahí cuando viene el primer entuerto. El recorrido está lleno de loops y marcas para cada distancia, sin darme cuenta me equivoco y salgo a una carretera por donde corro unos 200m antes de darme cuenta de que me he salido del track. No pasa nada, me encaramo por una colina y haciendo un esfuerzo innecesario me recupero de mi pérdida, me tranquilizo y sigo, vamos a concentrarnos más.

Llego al primer avituallamiento en el 16 aprox y repongo con calma para seguir a mi ritmo. Hasta el km 30-31 todo fluye de maravilla, el ritmo es más alto del que imaginaba pero el desnivel también… Según mi track llevamos 1200m+ en 30k y nos quedan otros casi 1200, pero bueno, estas cosas siempre pasan y me encuentro bien así que voy disfrutando. Incluso mirando a los árboles donde veo cacatúas y demás aves exóticas, hasta se me cruza un pavo por el camino (hay muchos por todas partes).

foto: Organización

SEGUNDO AVITU Y ESTOY PERDIDO

Como he dicho ya, había muchos loops y puntos donde cruzabas varias veces. El segundo avituallamiento se encuentra en el km 30-31 en el mismo lugar donde tomábamos horas antes la salida. Había que entrar y volver a salir por el mismo camino. Voy un poco acalambrado porque la temperatura ha subido mucho y he perdido alguna pastilla de sal por el camino, así de torpe soy, pero no pasa nada porque ahora cojo en el avitu.

La gente que allí me atendió estaban igual o más nerviosos que yo y fue un poco lío, lentitud al rellenar, no encontraban las sales, me volcaron las botellas encima y hubo que volver a llenarlas… bueno, son cosas que pasan pero ya salgo un poco mosca y con la cabeza en otro lado.

Lo peor viene cuando, sin recuperarme de mi revuelo mental, me cruzo con el 2do y el 3o que vienen de frente y calculo que ya no les saco más de 800m. Tengo que reponerme y apretar pero mis demonios se apoderan de mi cabeza y entre una cosa y otra me despisto y no tomo el giro a la izquierda que me llevaba por el track y vuelvo a salir como si fueran los primeros kms de carrera.

En ese momento entro en pánico, doy vueltas, no sé para dónde tengo que ir, pregunto y nadie me sabe indicar, están tan perdidos como yo. Digo palabrotas en inglés y en español, pero me pongo en modo supervivencia y me calmo, pienso y acabo volviendo hasta encontrar mis marcas.

TOCADO Y HUNDIDO

Cuando vuelvo al camino estoy fatigado del esfuerzo mental y físico que ha supuesto mi despiste. He perdido tiempo y energía innecesarios y trato de reponerme pero al mirar atrás veo al segundo pegado a mi… me hundo del todo. Cuando me da caza le pregunto cuántos kms lleva él: lleva más de 1km menos que yo. Desde ese momento sólo puedo pensar que tendría que llevarle 5 o 6 minutos de ventaja y que soy inútil, que he perdido el liderazgo por torpe y que aún quedan más de 30kms, puedo perder hasta el podium, quién sabe.

Aguanto con él hasta el km 37, 38 para mi pero al final el esfuerzo anterior pasa factura y tengo que ser inteligente y soltarme de su ritmo. Finalmente llego al avituallamiento del km 44 y me lo tomo con calma para salir de ahí bien cargado y encarar la última media maratón.

RESURGIENDO COMO EL AVE FÉNIX

Salgo del 44 y me encuentro de frente al tercero, aprovecho que es cuesta abajo para apretar un poco pero llevo pequeños calambres y no me atrevo a ir muy rápido, además acabo de pasar los 46kms… nunca había corrido más allá de esa distancia, soy conservador y me limito a llevar un ritmo constante.

Voy delante todo el rato pero a ratos le veo, parece que me va a cazar en las cuestas arriba pero cuesta abajo voy más fuerte. Con el paso de los kms vuelvo a encontrar sensaciones, dentro de la fatiga que llevo claro está. Incluso me paro en una fuente a echarme agua por encima ya que el calor aprieta hasta los casi 20ºC.

En el km 53-54 salimos de nuevo a la ciudad, nos esperan los últimos 13kms de asfalto hasta llegar a la meta, menudo calvario.

ARRASTRÁNDOME POR LA CIUDAD

Calles de chalets al principio que dan paso a avenidas más concurridas donde la gente nos mira atónita. Menudas pintas debemos de llevar después de más de 5h pululando por ahí.

En el km 62 llegamos al río y nos espera el último avituallamiento donde yo me paro a rellenar agua dejando que el 3º me adelante. Estoy ya muy cansado y me da todo igual, necesito agua y no voy a matarme por un puesto que ni siquiera imaginaba poder conseguir.

Salgo de ahí para encarar esos últimos kms con el río Brisbane a mi vera. El caso es que veo muy de cerca al otro atleta y trato de mantener un ritmo conservador pero sin dejar que se me escape, mi estrategia es esperarme a que queden menos de 2kms y atacar para ver si puedo pasarle.

Cruzamos el último puente y aparece el cartel: 2kms a meta.

 

LA SORPRESA FINAL

No sé en qué momento le he perdido de vista, pero el caso es que no le veo, así que miro atrás para ver si me persigue alguien y tampoco veo a nadie con dorsal. Hay mucha gente así que no me confío, estoy tan cansado que es difícil ver si son corredores de la carrera o gente que ha salido a hacer ejercicio.

Por fin llego a las escaleras de Kangaroo Point, son 25m+ en 50m de escaleras y estoy a 300m de meta. Subo como puedo y trato de mantener mi postura para entrar en meta de manera digna, que hay cámaras y gente mirando.

Me felicitan, me colocan la medalla, menos mal… pensaba que no llegaba. Miro el reloj : 67.3k 2360+ 6h19′ ritmo 5’39»/km, casi 70kms, qué locura. Felicito al primero y me enseña su reloj «me habrías ganado», veo en su pantalla 66.2k 6h15’… bueno al menos soy tercero, pues va a ser que no.

Me doy la vuelta y veo ¿al que me adelantó?. Le pregunto cómo narices ha entrado detrás de mi y me dice «me has pasado al final». Atónito pregunto a la organización si he entrado segundo y me lo confirman. unos 40s antes que el tercero y 4min después del primero. Qué locura de carrera.

EL LADO BUENO DE LAS COSAS

Menudo torbellino de emociones tengo en el cuerpo. Por un lado he hecho podium llevándome una inesperada plata cuando pensaba que era tercero y… seamos sinceros, nadie daba un duro porque yo hiciera aquí algo mejor que un TOP10, ni yo mismo.

Pero por otro lado podría haber ganado si no hubiera sido tan torpe de perderme. Pero bueno, soy una persona bastante optimista y paciente, hoy no pudo ser pero sé que lo tengo dentro, así que será otro día, sólo tengo que seguir trabajando y mejorando.

 

CONCLUSIÓN

La experiencia de viajar a Australia a correr BRISBANE TRAIL ULTRA ha sido algo único e irrepetible. Son oportunidades que se tienen muy pocas veces y hay que exprimirlas al máximo.

Si os gusta viajar y correr, conocer culturas diferentes y vivir un ambiente único, os animo a conocer esta gran carrera con una organización tan cercana y preocupada. Aprovechad el viaje con la familia, con los amigos o con quienes queráis porque no os vais a arrepentir en la vida.

Estoy seguro que de BTU seguirá creciendo y creciendo a nivel internacional porque, no sólo forma parte del circuito Spartan Trail World Championship, si no que está hecha con muchísimo cariño y dedicación por gente como tú y como yo, corredores y corredoras que saben lo que es vivir el trail.

Gracias Shona, Cora, Mora y demás familia de BTU, nos habéis dado una historia inigualable que vivir y contar.

Se despide este #PatronCarrerasDeMontana , ya vale de chapa por hoy.

 


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